Desde el famoso triple de Herreros el Tau ha ido acumulando desquites aquí y allá. Tres triunfos en Vitoria por más de 21 puntos. Ayer anduvo cerca de repetir. Rompió al Madrid en el tercer periodo y puso el pie en el último ganando por 19: 72-53. Una reacción interruptus dejó la renta final en diez. Otra pequeña revancha, la primera, por cierto, de Dusko Ivanovic, de vuelta de sus tres campañas de azulgrana culé.
Con este éxito el Baskonia olvida su tropiezo frente al Bruesa. Primero, victoria a los puntos en Liubliana, y, luego, KO al Madrid, en un duelo con sabor a playoff. Pelea cuerpo a cuerpo, piques, sangre, entusiasmo, frustración y enganchada, sin más, en el túnel de vestuarios. El Tau, otra vez de Dusko, ha cogido el sendero bueno, el que le puede llevar a reeditar título por primera vez en su historia.
Al otro lado del ring el Madrid acabó noqueado, durante varios minutos fuera de sí, totalmente roto; ido, perdido. Plaza maquilló un final deprimente apostando por los jugadores con mayor predicamento en el vestuario: Reyes, Bullock, Hervelle, Mumbrú... Con coraje y una defensa zonal recortaron trece puntos y se colocaron a seis (77-71, minuto 37). Pese al miedo de algunos, lo vimos claro, no volverían viejos fantasma al Buesa Arena. Dos triples frontales de Teletovic reventaron la zona (83-72). El bosnio se aprovechó de que por ahí andaba Bullock, muchísimo más bajo que él, para lanzar con facilidad. La sentencia. Hasta el final sólo hubo enredos, protestas y una técnica al banquillo visitante.
De primeras, los blancos sujetaron a los locales. Mejor defensa, aunque, como apuntaba Scariolo, canastas fáciles erradas por el Tau. Hosley y Massey levantaban el ánimo en la batalla física. Uno se torció un tobillo y el otro se marchó al banco. Cuando volvieron ya no fue lo mismo. Reyes se pegaba con cierto éxito, mientras Lazaros se encogía solito. El Madrid no metía triples -uno al descanso, y de Massey-; sin abrir el campo los de dentro se ahogan. Enfrente, Prigioni, cinco. Bullock no anda fino (da igual lo que digan sus números) y a Hervelle no le sale nada. Pese a todo el Real aguantó hasta el minuto 25: 53-49. El acabose lo pusieron Rakocevic y un parcial de 17-4. El Madrid se arrastraba.